Aunque aún quedan dos meses para que llegue el trade deadline, los rumores de traspasos empiezan a llegar a Sacramento. En los últimos días, los mentideros señalar a Boston Celtics como principal foco de atracción para DeMarcus Cousins y Tyreke Evans.
Pero más allá de las intenciones, o no, de los Kings de traspasar a sus dos jóvenes, la historia no juega a favor de la franquicia californiana. Repasamos los últimos traspasados llevados a cabo en Sacramento con sus estrellas de por medio.
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Doug Christie fue el primero de aquel quinteto mágico en salir del equipo allá por enero de 2005. El entonces escolta titular de la franquicia hizo las maletas para poner rumbo a Orlando Magic. A cambio llegaron un Cuttino Mobley que estaba en su madurez deportiva, y un Michael Bradley que apenas había jugado una centena de partidos en la liga. La pérdida fue significativa pero lo peor estaba por llegar.
Apenas un mes después de la marcha de Christie, los Maloof decidían dar un giro drástico en el equipo. El elegido para salir de la ciudad era nada menos que Chris Webber, referente en el equipo durante los últimos años y visiblemente cabreado con un Peja Stojakovic sediento de protagonismo. Junto a Webber se fueron a Philadelphia 76ers, Matt Barnes y el propio Bradley, para que llegasen piezas tan codiciadas -no- como Brian Skinner, Kenny Thomas y Corliss Williamson, que ya había jugado antes en la ciudad.
La decandencia comenzaba y 11 meses después de confiar el equipo a Stojakovic, el serbio era traspasado. Ponía rumbo a Indiana Pacers, mientras que a llegaba a los Kings el mejor alero que ha habido en el equipo en los últimos años: Ron Artest. Un cambio simple en el que no entraron más jugadores y en el que los Kings no salieron perdiendo demasiado.
Tras un febrero tranquilo llegó 2008. La irrupción de Beno Udrih aprovechando una lesión de Mike Bibby hizo que el otrora base titular se convirtiera en moneda de cambio. El trade no pudo ser peor. Bibby se fue a Atlanta Hawks a cambio de dos bases de escaso nivel como Anthony Johnson y Tyron Lue, un decepcionante número 5 del draft como Shelden Williams, el fallecido Lorenzen Wright y una segunda ronda que se convirtió en Sean Singletary. Horrible.
Tras el traspaso de Bibby, la apuesta por Spencer Hawes y Jason Thompson hizo que los Kings pasaran de Brad Miller. El pívot había logrado ser All-Star en Sacramento pero se marchó rumbo a Chicago Bulls -junto a John Salmons- por Drew Gooden (cortado tras un partido), Michael Ruffin, Cedric Simmons y Andrés Nocioni. Una operación desastrosa en busca de un espacio salarial que nunca se gastó.
El último de esta larga cadena de traspasos bajo sospecha llegó febrero de 2010 y con él, la marcha de Kevin Martin a Houston Rockets (junto a Hilton Armstrong y Sergio Rodríguez). A cambio, en un traspaso a tres bandas, llegaron Joey Dorsey, Larry Hughes (que nunca jugaría en Sacramento) y Carl Landry. Otro error más.
¿Seguro que hay que traspasar a Cousins y/o Evans?
